Las autoridades de Rusia limitaron los vuelos en los aeropuertos de Sheremetievo, Damadedovo y Zhukovski, tras repeler un grupo de naves sin piloto que afectó edificios y dejó víctimas entre los civiles.

El alcalde moscovita, Serguei Sabianin, se refirió al derribo de drones que se dirigían a la capital rusa, donde, afirmó, se analiza la situación de un condominio en el distrito moscovita de Troitski, donde cayeron fragmentos de un dron.

De acuerdo con el gobernador de la región de Moscú, Andrei Vorobiov, en la región de Remenskoye, al menos tres edificios resultaron afectados por el impacto de drones en la zona de Sportivni Praezd, lo cual tuvo como saldo una mujer fallecida de 46 años, indicó la agencia TASS.

Vorobiov descartó una información aparecida en un principio sobre el supuesto deceso de un menor de nueve años, durante los ataques.

Ucrania emplea drones nuevamente en la profundidad rusa

La defensa antiaérea rusa destruyó 14 drones en los distritos urbanos de Podolsk, Remenskoye, Liúbertsy, Domodedovo y Kolomna, 59 en la región de Briansk y 12 en la de Kursk, estas dos últimas fronterizas con Ucrania.

Asimismo, la artillería derribó a dos aparatos sin piloto sobre la región de Tula, cuyos restos cayeron sobre una instalación de combustible y energía, así como siete en Kaluga.

En el aeropuerto internacional de Zhukovsky, en la región de Moscú, cuya actividad quedó suspendida, se investigan las consecuencias de la caída de fragmentos de un dron destruido sobre esa instalación.

Rusia lanzó una operación bélica el 24 de febrero de 2022, ordenada por el presidente Vladimir Putin, quien señaló entonces que con ello se buscaba proteger a la población sublevada de la región del Donbas, así como desmilitarizar y desnazificar a Ucrania.