Las honras al fallecido expresidente de Estados Unidos James Carter continúan en la capital Washington DC, con una capilla ardiente instalada en la sede del Congreso federal y que estará abierta hasta la celebración del funeral de Estado el jueves 9 de enero.

Decenas de personas desafiaron las gélidas temperaturas para observar el traslado del féretro mientras recorrió desde el Memorial de la Marina el mismo itinerario que realizó Carter junto a su esposa Rosalynn en 1977, cuando tomó posesión de su cargo.

En la explanada del Capitolio lo recibió el saludo de salvas de artillería, la guardia de honor depositó la caja mortuoria en la rotonda y allí se ofició un servicio con la participación de la familia y miembros del legislativo. Entre los oradores estuvieron el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, y también la vicepresidenta de la nación, Kamala Harris.

La capilla ardiente permanecerá abierta desde esta noche a la mañana del jueves, día nacional de luto y cuando trasladarán el cuerpo hacia la Catedral Nacional de Washington para el funeral de Estado.

Luego será nuevamente transportado en avión a Georgia, donde habrá un servicio privado en la Iglesia Bautista Maranatha para ser inhumado luego junto a su fallecida esposa en el predio familiar.

El “mejor expresidente” de Estados Unidos

James Carter fue el presidente número 39 de Estados Unidos, falleció el pasado 29 de diciembre a los 100 años de edad tras una larga batalla contra del cáncer y dejó una trayectoria sobresaliente por su desempeño luego de su único mandato al frente de la Casa Blanca.

La noticia del deceso ocupó los principales titulares dentro y fuera de suelo estadounidense y de inmediato crecieron las declaraciones y mensajes de importantes figuras políticas y gobiernos que expresaron condolencias y también resaltaron la reputación de una personalidad definida como el “mejor expresidente de Estados Unidos”, por su labor admirable después de terminar su gestión.

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